CDXtra. El juego 5 de la World Series 2017 pareció un combate de Boxeo llevado a su ultimo Round y que los participantes se hayan golpes hasta el último segundo. Fue emocionante. Fue electrizante.
El juego 5 puede haber sido el paseo más emocionante y rítmico de un juego de béisbol que cualquiera de nosotros haya visto o verás alguna vez. . Los siete jonrones, los ocho cambios principales, y el hecho de que los Astros arrancaron la derrota de la victoria de las quijadas de una derrota aparentemente segura en no solo uno, sino tal vez tres o cuatro veces diferenciaron este juego de cualquier otra Serie Mundial juego que puedo recordar Fue un clásico instantáneo, junto con el Juego 6 en 1975, el Juego 1 de 1988, el Juego 6 de 2011, el Juego 7 de 2001 y el Juego 6 de 1986. Deberá, y debería, figurar prominentemente en los Highlights más destacados y en la memoria de cualquier aficionado al béisbol que tuvo la suerte de presenciarlo. El que se fue a la cama se lo perdió.
Los Astros y los Dodgers se combinaron para 25 carreras, 28 hits y 11 bases por bolas en el Juego 5 de la Serie Mundial. Fue una guerra arrolladora y demoledora de un juego que tardó cinco horas y 17 minutos en completarse desde su comienzo a las 8:21 PM ET. Y fueron los Astros quienes finalmente salieron victoriosos en la parte baja de la décima entrada gracias a Alex Bregman.
Los Dodgers se subieron en la pisara rápidamente, cargando las bases con un out contra el abridor de los Astros Dallas Keuchel en la parte alta de la primera entrada. Después de que Cody Bellinger se ponchó, Logan Forsythe pegó un par de carreras con un sencillo al jardín izquierdo. Con el bateo de Yasiel Puig, Keuchel hizo un lanzamiento de pickoff a primera base y Forsythe era un pato muerto. Corrió a la segunda base y el inicialista Yuli Gurriel hizo un lanzamiento amplio. Forsythe pudo meter su pie en la bolsa por delante de la etiqueta de José Altuve, una llamada que fue confirmada en la revisión de la repetición. Otra carrera anotó en el proceso, dando a los Dodgers una ventaja de 3-0.
El público en el Minute Maid Park, que enmudeció cuando el as Dallas Keuchel permitió que los Dodgers tomaran la delantera por 4-0, no dejó de emocionarse en el resto de un encuentro en que el pitcheo brilló por su ausencia.
Nadie pudo haber previsto semejante despliegue de artillería durante una noche en que Clayton Kershaw abrió por los Dodgers y Keuchel por los Astros.
José Altuve, Carlos Correa, Yuli Gurriel, George Springer y Brian McCann dispararon sendos vuelacercas por Houston, que igualó 4-4 la pizarra ante Kershaw.
“Recuerdo cuando estábamos abajo 4-0”, dijo Bregman. “Yo, Altuve, Correa y Yuli estábamos detrás del montículo y dijimos. Oigan, estamos contra la pared. ¿Qué tal si nos relajamos?”
Cody Bellinger sacudió un bambinazo de tres vueltas para que los Dodgers recuperaran la delantera por 7-4. Pero los Astros volvieron a remontar para irse arriba 11-8 tras siete capítulos y 12-9 luego de ocho.
El cubano Yasiel Puig aportó otro cuadrangular por los Dodgers, que rayaron tres veces en el noveno inning para igualar el juego a 12.
Pero los Astros rieron al último, muy pasada la medianoche. Con dos outs, Bregman bateó su hit y puso fin a la tensa pulseada de cinco horas y 17 minutos.
Esta Serie Mundial había incluido ya un encuentro electrizante, el segundo, en que Houston se impuso por 7-6 en 11 capítulos.
Pero con cada uno de los siete jonrones, el juego dominical se fue configurando quizás como el más enloquecido en la historia del Clásico de Otoño, incluso por encima de aquel en que los Azulejos de Toronto se impusieron 15-14 a los Filis de Filadelfia en 1993.
En el “Año del Jonrón”, ninguna ventaja pareció cómoda.
“Creo que en toda esta serie las emociones han estado en una montaña rusa”, comentó el manager de los Dodgers, Dave Roberts. “Son los dos mejores equipos en busca de un campeonato. Y son dos equipos que no se rinden hasta que caigan 27 outs”.
O más.
El bambinazo de Puig, que produjo dos carreras, fue el 22do conectado en esta Serie Mundial, un récord. Un sencillo de Chris Taylor ante Chris Devenski con dos outs hizo necesarias las entradas adicionales.
“Éste ha sido el mejor juego de la historia, seguro”, sentenció Correa.
Ahora, con dos bullpens extenuados, los clubes tendrán un día para recuperarse.
El sexto juego está previsto para el martes en el Dodger Stadium. El abridor Justin Verlander tratará de conseguir el título, mientras que Rich Hill intentará salvar a los Dodgers.
Por los Dodgers, el puertorriqueño Kike Hernández de 3-0 con dos anotadas. El cubano Puig de 5-1 con una anotada y dos producidas.
Por los Astros, los venezolanos Altuve de 5-3 con tres anotadas y cuatro empujadas, Marwin González de 5-0. El puertorriqueño Correa de 5-3 con dos anotadas y tres impulsadas. El cubano Gurriel de 5-2 con una anotada y tres remolcadas.
Los Astros, que ahora tienen una ventaja de 3-2 en la serie, intentarán ganar su primer campeonato el martes cuando los dos clubes se enfrenten para el Juego 6 de la Serie Mundial. Justin Verlander se enfrentará a Rich Hill en el Dodger Stadium.