Julio César Chávez Jr. deberá pasar al menos seis semanas sin boxear tras la cirugía a la que fue sometido por múltiples fracturas en la nariz y los 10 puntos de sutura que le pusieron para cerrar la herida en la ceja izquierda, pero el el boxeador mexicano aseguró: “A los que dicen que estoy acabado, acabado no estoy”.
El sinaloense dijo que además de una fractura en el tabique nasal que se reportó de inicio, los especialistas que lo atendieron encontraron cuatro microfracturas más en la misma zona. Por lo menos en las próximas semanas, no podrá hacer sesiones de sparring, aunque sí tiene permitido realizar actividad física ligera.
“Fue una fractura y cuatro microfracturas, más las 10 puntadas; en seis semanas puedo hacer sparring”, dijo Junior. “Siento que estaba peleando bien, estaba ganando la pelea, Jacobs se asustó por mi fortaleza y cuando empecé a entrar me metió el hombro, me puso los codos, me cortó con un codazo, y empecé a sangrar mucho, no veía con ese ojo y luego me pega con el hombro en la nariz, no he visto la repetición pero creo que fue así, y luego vino ese uper que me explotó la nariz por dentro y no podía jalar aire”, explicó.
“Con todo respeto, Jacobs es un peleador cochino, no me dejó pelear, pero pedimos la revancha, no sé si se pueda dar, yo llegué a lastimarlo en el quinto round, pero el parteaguas fue la cortada. Y a todos los que dicen que estoy acabado, acabado no estoy”, sentenció Julio, quien dejó su marca en 51-4-1 y 33 nocauts, cayendo por tercera vez en sus últimas seis peleas profesionales en un lapso de cuatro años y medio.
Chávez aseguró que pretende volver en marzo próximo y reiteró a su equipo que le gustaría la revancha ante Daniel Jacobs, pero eso dependerá de lo que puedan conseguirle.