Se acabó la carrera de Eli Manning en la NFL. Los Giants anunciaron en su página web que el quarterback dará una conferencia de prensa el viernes en la que hará oficial el final de su carrera.
Dos veces ganador del Super Bow, Eli ha jugado 16 temporadas en la NFL, pero en 2019 cedió la titularidad al novato Daniel Jones y aunque fue titular en dos partidos en el último mes, el mariscal diría adiós a los emparrillados a los 36 años.
“Por 16 temporadas, Eli Manning definió lo que es ser un New York Giant dentro y fuera del campo. Eli es nuestro único jugador que ganó dos veces el premio al Más Valioso del Super Bowl y es uno de los mejores jugadores en la historia de la franquicia”, dijo John Mara, el CEO de los Giants, en un comunicado. “Fue el epítome de profesional y represento a nuestra franquicia con dignidad y responsabilidad. Ser el quarterback de los Giants significaba algo para Eli y lo era todavía más para nosotros. Estamos más que agradecidos por sus contribuciones a nuestra organización y esperamos celebrar su inducción al Anillo de Honor de los Giants en el futuro cercano”.
Eli Manning llegó a los Giants en el Draft de 2004, en un cambio con los Chargers el día del sorteo, tras su negativa de jugar con el equipo del sur de California, lo que obligó a que acordaran un traspaso con el equipo neoyorkino. No fue titular de inmediato, ya que Kurt Warner arrancó la temporada con marca de 5-4 antes de pasarle las riendas al jugador proveniente de Ole Miss.
Fue el primero de 210 partidos consecutivos de temporada regular que inició Eli, hasta que el coach Ben McAdoo lo mandó a la banca para la semana 13 de 2017, cortando la tercera racha de titularidades más larga de la historia de la NFL.
Eli recuperaría la titularidad en 2018, pero los Giants han vivido una racha de tres temporadas perdedoras de manera consecutiva y en 2020 tendrán a su cuarto entrenador desde el 2015.
Manning terminó su carrera con marca de 117-117, con 57,023 yardas por pase (#7 en la historia) y seis apariciones en la postemporada, ganando el Super Bowl XLII y XLVI, ambos ante los Patriots, en los únicos dos años que ganó un partido de playoffs.