Las malas noticias con Dembélé no cesan. Aunque ayer desde el club se restaba importancia a la información en la que revelábamos que el francés se había retirado lesionado del entrenamiento, las pruebas a las que se ha sometido hoy confirman que Ousmane se ha vuelto a lesionar de gravedad.
El extremo sufre una rotura completa del tendón proximal del bíceps femoral derecho si bien el club no confirmó el tiempo de baja que será de varios meses. De este modo, su regreso para la Liga de Campeones, el objetivo que se puso desde el club cuando cayó lesionado el pasado mes de noviembre contra el Borussia Dortmund, queda descartado.
De este modo, sigue el calvario del atacante con las lesiones. Se ha perdido 63 encuentros oficiales desde que fichó por el Barcelona por culpa de este problema. Una cifra que va a seguir engordándose a la luz de las últimas informaciones.
Una plantilla coja
Esto no hace más que agravar el problema que tiene el Barcelona de aquí a final de temporada. Los azulgranas tienen una plantilla excesivamente corta para afrontar todos los objetivos que tiene para este último tramo del curso.
Quique Setién sólo dispone de tres atacantes en el equipo y uno de ellos es técnicamente jugador del filial. Se trata de Griezmann, Leo Messi y Ansu Fati.
Carles Pérez, un jugador que como Ansu se encontraba en dinámica de primer equipo pese a pertenecer al filial, ha salido a la Roma.