Tras conocerse lo ocurrido son muchas las voces que han denunciado la situación con el fin de evitar que se generen estigmas como el sufrido por Kanae, entre ellas la de su propio club, el Real Oviedo, que agradeció en nombre de la jugadora “las muestras de cariño” y condenó lo ocurrido a través del presidente del femenino.

Es el primer año de Fukumura en el conjunto carbayón, y no es la única jugadora asiática del equipo asturiano, que tiene también en sus filas a la mediocentro Yuki Togawa –recién renovada– y un estrecho vínculo como club a la comunidad asiática después de que esta se volcara significativamente también en la ampliación de capital del club azul en 2012.