Jaylin Davis llamó a su casa y charló con su familia. De inmediato, le quedó clara la decisión que iba a tomar.
Se arrodillaría cuando se interpretara el himno nacional.
Pero Davis ni siquiera estaba seguro de si se realizaría la ceremonia del himno. Los San Francisco Giants jugaban el lunes un encuentro de exhibición en Oakland, sin espectadores, tras los meses de inactividad en el béisbol a consecuencia de la pandemia de coonavirus.
Resultó que Davis recibió apoyo de todo tipo, incluso del manager Gabe Kapler, quien está en su primer año con San Francisco y puso también una rodilla en tierra durante la victoria de los Giants por 6-2.
Al menos una docena de empleados y peloteros de los Giants –más que en la noche anterior– se arrodillaron el martes. Y eso que el bullpen del jardín central no era visible, de modo que se desconoce si alguien realizó el gesto de protesta.
Los jardineros Mike Yastrzemski y Austin Slater hicieron la genuflexión, lo mismo que el coach de primera Atoan Richardson, mientras que el campocorto Brandon Crawford se paró entre Davis y Richardson, colocando una mano en el hombro de sus compañeros.
“El que ellos hayan tenido el valor suficiente de hacer esto significó mucho de verdad”, dijo Davis el martes. “En cierto modo habíamos hablado, antes de comenzar incluso el campamento, de que queríamos que se supiera que no íbamos a permitir que todo pasara a segundo plano sólo porque el béisbol estaba de regreso”.
Kapler y Davis sostuvieron comunicación frecuente sobre temas sociales y raciales. El manager llamó a Davis el lunes por la mañana para preguntarle qué haría.
Después del juego, Kapler dijo que los Giants seguirían sosteniendo conversaciones relevantes sobre su papel para generar un cambio y causar impacto a fin de enfrentar los problemas de racismo e injusticia.
Davis, de 26 años y de raza negra, consideró que fue difícil la decisión de arrodillarse, por ser novato. Luego, Yastrzemski y Hunter Pence se le acercaron y le dijeron que lo apoyarían.
El jardinero derecho comentó que tiene más ideas para llamar la atención sobre los problemas.
“Me dijeron que no me preocupara por ser un chico de primer año. Si me sentía cómodo haciendo esto debía hacerlo”, relató Davis.