El jugador de los Trail Blazers de Portland, Jusuf Nurkic, le hubiera encantado que su abuela hubiera presenciado su regreso a las duelas después de más de un año de estar fuera por una grave lesión que sufrió en su pierna. Pero lamentablemente su deseo pareció ser más una pesadilla.
Es difícil controlar tus emociones cuando una tragedia te está consumiendo por dentro y así es el caso de Nurkic, pues tiene que lidiar con el reinicio de la temporada 2019-20 de la NBA sabiendo que su abuela se encuentra en coma al ser una víctima más de la pandemia del Coronavirus, motivo que lo hizo pensar muy seriamente en postergar su reaparición para estar cerca de ella.
El regreso de la NBA se celebró este jueves, después de más de cuatro meses de estar parada por la pandemia, la organización adaptó el inmueble de Disney World de Orlando, Florida, para convertirlo en la “burbuja”, donde los equipos están disputando los partidos con el fin de concluir la temporada a tiempo.
Nurkic prefirió seguir con su equipo en Orlando, pero mandó un mensaje de conciencia a través de sus redes sociales para sus seguidores, dándoles consejos de cómo abordar el tema del Covid-19 en su vida diaria, suplicando que usen todas las medidas necesarias para evitar que se contagien del virus.
“Use la maldita máscara. La gente no entiende lo grave que es esto”, señaló.
En caso de que el jugador hubiera optado por abandonar la “burbuja” por un tiempo para poder estar al lado de su abuela, la NBA tendría que seguir las normas que impuso y una de ellas sería que durante su regreso tendría que mantenerse aislado por cuatro días, lo que haría que perdiera partidos.
Nurkic no es el único que tiene que cargar con la frustración y el dolor de que un familiar suyo esté luchando por su vida debido al Covid-19, pues Karl-Anthony Towns, de los Timberwolves, pasó por algo parecido, pero su situación fue aún más dolorosa, pues lamentablemente su madre falleció en abril a causa de la enfermedad.