Tom Brady no expresó cómo se sentía ante los señalamientos que hizo el coach de los Tampa Bay Buccaneers, Bruce Arians, sobre sus errores en la derrota de la Semana 1 y sólo dio una respuesta sencilla.
“Él es el coach. Yo soy un jugador. Sólo intentamos ganar un juego”, dijo Brady.
Los comentarios de Arians provocaron críticas al coach por hacer algo que era considerado imposible durante la estancia de Brady en New England.
Byron Leftwich, coordinador ofensivo de Tampa Bay, ya ha sido blanco de las críticas de Arians en el pasado e, incluso, se dirigió a él con groserías por algo que Ben Roethlisberger hizo cuando trabaja como quarterback suplente de los Pittsburgh Steelers y Arians era el coordinador ofensivo.
“Se trata de B.A. siendo B.A.”, dijo Leftwich. Lo único de lo que nos podemos preocupar es de entrenar, trabajar, mejorar e intentar corregir nuestros errores para intentar ganar partidos”.
Lo que sí dejó ver Brady el jueves es su creciente impaciencia. Ganar es su enfoque particular por ahora y todo lo que suceda alrededor sólo es distracción.
“Es su espíritu competitivo. Realmente sale a relucir cuando perdemos, cuando las cosas no salen bien e las prácticas. Sale a relucir porque no quiere perder y no quiere que perdamos como equipo”, dijo el receptor Scotty Miller. “Queremos ser grandes, queremos ganar partidos”.
Derrotas en lo general no han sucedido mucho en la carrera de Brady, quien tiene marca de 219-65 en su carrera, con un porcentaje de victorias (.771) más alto que el de cualquier quarterback en la historia, sin embargo, cuando las derrotas aparecen, históricamente, Brady se recupera.
Desde 2001, Brady tiene marca de 48-13 (.787) tras una derrota en temporada regular, segundo porcentaje de eficiencia detrás sólo del de Russell Wilson, quarterback de los Seattle Seahawks, de acuerdo a ESPN Stats & Information.
Es por esta razón que Arians dijo, “Esperaría que (Brady) demuestre más determinación esta semana”.
Matt Rhule, coach de los Carolina Panthers, recordó el regreso de 25 puntos de Brady en el Super Bowl LI ante los Atlanta Falcons, juego que vio como aficionado.
“Sabemos que tendremos las manos llenas”, dijo Rhule, quien viajará con los Panthers a Tampa para enfrentar a los Buccaneers en la Semana 2. “Nadie es mejor en recuperarse de una derrota que Tom Brady”.
El primer punto en la lista para Brady es mejorar la comunicación.
Durante el juego ante los New Orleans Saints, la ofensiva lució fuera de ritmo. La primera de las dos intercepciones de Brady fue resultado de que el quarterback y Mike Evans vieran coberturas diferentes en una ruta de opción en la que el receptor cortó su ruta no fue más profundo, al creer que vio Cover 2, mientras que Brady, de quien Arians dijo que vio la cobertura correcta, apreció cobertura en cuartos.
“Es sólo trabajar en las cosas y estar en el campo al mismo tiempo. Es como todo, mientras más estemos juntos, menos tendremos que decir ciertas cosas, porque ya las habremos experimentado, ya habremos hablado de ellas y habremos trabajado en ellas”, dijo Brady. “Hay muchas cosas en blanco y negro en el futbol americano y también mucho matiz gris. El problema es que, cuando hay demasiado gris, yo pienso una cosa, tú piensas otra y no importa quién está bien o mal”.
En el caso de Evans, parte de la falla de comunicación se originó porque el receptor perdió tres días de práctica la semana previa por una lesión en el muslo. Esta semana, Chris Godwin está en el protocolo por conmociones, lo que podría crear problemas adicionales, pues él fue el líder receptor de los Buccaneers en la Semana 1 con 79 yardas.
Como Brady, Evans también ha mostrado capacidad para recuperarse. En juegos después de suma una o no tener recepciones, promedia seis recepciones y 85 yardas, de acuerdo a ESPN Stats & Info.
“La realidad es que las malas jugadas suceden y cuando pasan, uno se pone en una posición de desventaja”, señaló Brady. “En medida de lo posible, debemos eliminar el, ‘Oh, yo creí esto, tú pensaste esto otro’, ‘Una vez estás bien, en otra estás mal’. La realidad es que el otro equipo no puede robar el balón. Eso va a evitar que anotemos y va a evitar que ganemos”.
