El ala cerrada de los Las Vegas Raiders, Darren Waller, fue multado con 30,000 dólares, y nueve de sus compañeros, incluyendo al capitán del equipo y quarterback Derek Carr, fueron multados con 15,000 dólares cada uno, por no observar los protocolos de coronavirus en un evento público de caridad organizado por la fundación de Waller la semana pasada, dijo una fuente a Dan Graziano de ESPN, confirmando un reporte de NFL Network.
Los jugadores no portaron máscaras para el evento, que recaudó dinero para ayudar a jóvenes que luchan contras adicciones. Carr fue fotografiado charlando y tomándose fotografías con algunos de los presentes, muchos de los cuales tampoco portaban máscaras.
“Estoy al tanto, sí”, respondió el head coach de los Raiders, Jon Gruden, el lunes después de que circularon reportes de las multas. “Y sé que nuestros jugadores se van a ocupar de ello individualmente, y sé que se arrepienten de cualquier daño que pudieron haber causado, y son muy sensibles a ello y nos ocuparemos de eso del modo adecuado”.
Aparte de Waller y Carr, los otros jugadores multados fueron el quarterback reserva Nate Peterman, los alas cerradas Jason Witten, Foster Moreau y Derek Carrier, los receptores abiertos Hunter Renfrow y Zay Jones, el esquinero Nevin Lawson y el centro de la escuadra de práctica, Erik Magnuson.
“De nuevo, voy a reiterar que estoy realmente orgulloso de nuestros jugadores y nuestros empleados y el trabajo que estamos haciendo batallando en contra de este virus”, dijo Gruden, “y seguiremos”.
Las Vegas, no obstante, ahora ha sido multado por un total combinado de 565,000 dólares en el último par de semanas por violar los protocolos.
Los Raiders fueron multados con 250,000 dólares y Gruden con 100,000 dólares por no utilizar apropiadamente su máscara durante la victoria con la que abrió la temporada el equipo frente a los New Orleans Saints el 21 de septiembre, y el equipo fue multado con 50,000 dólares adicionales por permitir a un empleado sin credencial a tener acceso al vestidor de Allegiant Stadium después de aquel encuentro.
Los jugadores de los Raiders fueron multados un total combinado de 165,000 dólares por sus acciones en el evento caritativo, que recaudó 300,000 dólares, de acuerdo a Gruden.
Dado que las multas recolectadas por la NFL son donadas a la caridad, existe una iniciativa para que el dinero de éstas últimas sea destinado a la Waller Foundation.
Además, el DragonRidge Country Club, donde se llevó a cabo el evento, fue multado con 2,000 dólares por la ciudad de Henderson por cuatro violaciones a las directivas de emergencia del gobernador de Nevada por COVID-19, incluyendo que la gente no portara las máscaras y que más de 50 personas asistieron al evento.
La NFL, mientras tanto, emitió un memorando a los equipos que reiteró la necesidad del cumplimiento, señalando, “Las violaciones al protocolo que resulten en el esparcimiento del virus y requieran ajustes al calendario, o impacten de otro modo a otros equipos, resultarán en medidas disciplinarias financieras o competitivas adicionales, incluyendo el ajuste o la pérdida de selecciones de draft, o incluso la pérdida de un juego en la mesa.
“Simplemente dicho, el cumplimiento es obligatorio”.
El propietario de los Raiders, Mark Davis, dio a ESPN la semana pasada, “Los chicos deben ser más firmes en contra del virus. Sigue siendo nuestro peor oponente”.
