El cabezazo sólido de Miles Robinson al 117 decretó la historia. Otra vez, como ocurrió en la final de la Nations League, hace unas cuantas semanas, México sucumbió ante Estados Unidos, pero ahora fue en la definición del título de la Copa Oro de la CONCACAF por 1-0 en tiempos extras.
Estados Unidos se coronó Campeón de la Copa Oro en Las Vegas. La ciudad del pecado fue la sede en la que la “USMNT” logró su séptimo título en este certamen, y como ocurrió en 2007, México cayó ante el eterno rival del norte.
Estados Unidos volvió a doblegar a México en muy pocas semanas de diferencia. Lo hizo con un representativo que no mostró a sus elementos estelares, ante un cuadro mexicano que presentó su mejor cuadro.
En el primer tiempo fue México el conjunto que tuvo mayor dominio de la situación y de la pelota, aunque la ocasión más peligrosa surgió de los norteamericanos.
Los de Martino fueron los que buscaron generar más oportunidades, con un Rogelio Funes Mori insistente, pero en un escenario en el cual el Tri abusó de los centros, área en donde los zagueros norteamericanos fueron dominantes.
Estados Unidos tuvo la ocasión de mayor riesgo frente al arco rival. Al 25′, Paul Arriola tuvo en sus pies en gol de la ventaja para los locales. El ex atacante de Xolos falló en el mano a mano con Alfredo Talavera, después de un error en la salida de México al arriesgar la pelota, y Arriola dejó escapar la más clara.
Los norteamericanos apostaron a tomar mal parada a la defensa mexicana, y a partir de entonces ese fue su método de acercarse al arco rival. De hecho en la última jugada del primer lapso.
Mexico tuvo que prescindir en la primera mitad de Héctor Moreno, quien se lastimó en la parte final de la primera mitad y Carlos Salcedo tuvo la chance de resarcir los errores que cometió en el encuentro anterior ante Canadá.
En el trámite del segundo tiempo, México perdió el dominio del encuentro y también la pelota. Posteriormente perdió también el protagonismo, que se tradujo en varias ocasiones claras de gol y que los norteamericanos dejaron escapar.
El panorama cambió para México en la recta final del encuentro. Martino mandó al campo a Rodolfo Pizarro y Erick Gutiérrez. México inclinó el campo a su favor y recuperó la pelota, e incluso hasta se generó alguna ocasión.
Alfredo Talavera salvó al México del gol al 95′ y salvó de nueva cuenta al Tri. No duraría mucho tiempo en mantenerse el arco en cero.
Al 117′, la historia se escribió. Edson Álvarez había cometido una falta táctica cerca del área y permitió que los norteamericanos tuvieran una última ocasión. El centro al corazón del área fue rematado con solidez y dejar a Talavera parado sin posibilidades de intervenir.
Estados Unidos ya había merecido el triunfo, y tuvo varias ocasiones claras, pero fue hasta la última oportunidad en donde decretó el gol que escribió la historia a favor de los norteamericanos.
