Miguel Cabrera y Robbie Grossman batearon jonrones seguidos para conducir el martes a los Tigres de Detroit hacia una victoria por 4-3 en un juego interligas ante los Cardenales de San Luis.
Dos días después de conectar su jonrón número 500, Cabrera logró el 501. Encontró un slider del abridor Jack Flaherty a 79 mph y colocó la pelota en el piso superior del graderío del jardín izquierdo, conocido como Big Mac Land, en la tercera entrada.
La pelota aterrizó a 423 pies del plato, por lo que el batazo del venezolano fue su segundo cuadrangular más largo en lo que va de la campaña.
Los Cardenales retiraron de inmediato a Flaherty (9-2) por un problema de rigidez en el hombro derecho. En dos innings, Flaherty aceptó cuatro carreras y el mismo número de imparables, con tres boletos en una labor de 46 lanzamientos.
La velocidad de sus pitcheos decreció abruptamente después de la primera entrada.
El abridor de 25 años se perdió 60 juegos, del 1 de junio al 12 de agosto, por un tirón en el oblicuo izquierdo. Había aceptado sólo dos carreras en 12 innings a lo largo de dos aperturas desde que salió de la lista de los lesionados.
Casey Mize (7-6) se llevó el triunfo al cubrir cinco innings en blanco.
Por los Tigres, los venezolanos Cabrera de 3-2 con una anotada y una producida, Harold Castro de 4-1 con una anotada, Víctor Reyes de 1-0. El dominicano Jeimer Candelario de 3-1 con una anotada.
Por los Cardenales, el puertorriqueño Yadier Molina de 4-1. El venezolano José Rondón de 1-0. El panameño Edmundo Sosa sin turno oficial pero con una anotada.