De manera increíble, el partido entre Brasil y Argentina, por las eliminatorias mundialistas de la Conmebol, fue detenido al minuto 6 por las autoridades sanitarias de Brasil que se metieron a la cancha para llevarse a los jugadores que incumplieron con las normas sanitarias.
El juego entre las dos potencias del fútbol de Sudámerica acababa de empezar, ya con algunos del buen fútbol que podría practicarse en el terreno de juego. Sin embargo, de manera inesperada, personal sanitario se hizo presente en el campo para impedir que Romero, Martínez, Lo Celso y Buendía estén en el campo de juego, al venir procedentes de la Premier League de Inglaterra.
Y es que el estado brasileño obliga a aquellas personas que hubieran estado hasta catorce días atrás en Inglaterra, en su ingreso al país, a hacer un aislamiento obligatorio. Tanto Lo Celso, como Martínez, Buendía y Romero vienen del Reino Unido, y si bien tenían una excepción, sanidad de Brasil se entromete.
Sin duda, éste es un papelón histórico que se da en el fútbol de Sudamérica, aunque trascendió que tanto la Conmebol como la FIFA habrían advertido a Brasil que, si les impedían a los cuatro argentinos de la Premier a jugar, perderían el duelo, por lo que se habría iniciado, para ser interrumpido y la verdeamarela no fuera castigada con la derrota.
