El más reciente movimiento dentro de la Liga de Béisbol Profesional de la República Dominicana (LIDOM), vino de parte de una de las nuevas rivalidades que han surgido dentro del circuito. Los Toros del Este recibieron al jugador del cuadro interior Marco Hernández, mientras que enviaron al jardinero Magneuris Sierra a Tigres del Licey.
Con el movimiento, ambos equipos apuntan debilidades claras que tenían en sus escuadras, pero lo positivo o negativo de la transferencia de jugadores dependerá de varios factores a lo largo de la temporada.
En el caso de Hernández, su capacidad de mantenerse saludable será determinante para jugar con los Toros. El jugador ha tenido múltiples episodios relacionados con lesiones que le han costado partidos a lo largo de su carrera en el béisbol invernal.
En 123 partidos (entre serie regular y postemporada), Hernández ostenta un promedio de bateo de .249 con un OPS de .627, siete cuadrangulares y 39 remolcadas. Principalmente ha sido reconocido como un jugador con buena defensiva y con una ofensiva promedio, aunque quedó como líder de cuadrangulares con cuatro en la temporada 2016-17. No juega en LIDOM desde el 2019.
El propio gerente de los Toros del Este, Raymond Abreu, reconoce este hecho. “No hemos visto lo mejor de Marco (Hernández) por problemas de lesiones, pero en estos momentos está saludable, es joven y atlético y confiamos que será de gran ayuda para darle profundidad a nuestro roster”, señaló el directivo al momento del anuncio del cambio.
Cubre la necesidad de jugadores del medio de la línea del terreno de juego que tienen los Toros, pudiendo ocupar la intermedia, la antesala y el campocorto, según la situación del momento.
De su lado, el cuestionante con Magneuris Sierra será la disponibilidad para jugar con el Licey. A pesar de que ha jugado cada año en LIDOM desde el 2016 (a excepción de la temporada 2020), ha visto reducir su número de partidos de manera consistente y nunca ha actuado en la postemporada. Sierra llegó este año a Los Angeles Angels, por lo que habrá que esperar para saber si el equipo tendrá la motivación de dejarlo jugar en la pelota de invierno.
Su ofensiva no ha sido óptima con el equipo, bateando para promedio de .188 y OPS de .462 en 87 partidos disputados. Sin embargo, resuelve un importante vacío en los jardines que tienen los Tigres desde hace años y arriba de eso, rejuvenecen más el plantel del equipo, uno de los de más edad en la actualidad.
“Magneuris (Sierra) es un muchacho con un nivel impresionante, que además batea a la zurda. Un jugador nativo que exhibe buena defensa, que aporta velocidad y que es un jugador experimentado en niveles ya establecidos como son Tirple A y Grandes Ligas”, señaló el gerente Audo Vicente de Tigres del Licey.
Al igual que los Toros, el propio Licey reconoce la debilidad con la que cuenta en los jardines en la actualidad, señalando a través de un comunicado de prensa: “con Sierra agregado a las filas azules, el equipo de los 22 veces campeones nacionales ven fortalecida una posición que se presentó como su principal desafío en esta temporada muerta”.
Ambos jugadores potencialmente pueden impactar de manera positiva el desempeño del equipo, pero no queda duda de que dependerá de salud y disponibilidad antes de poder determinar quién es el ganador del cambio o si los dos equipos se terminaran beneficiando del mismo.
