Los Gigantes al final ganaron la puja por los servicios del infielder puertorriqueño Carlos Correa, al llegar a un masivo acuerdo de 13 años y US$350 millones, una fuente le dijo a Mark Feinsand de MLB.com. El club no ha confirmado el trato.
El pacto, que supera el del puertorriqueño Francisco Lindor (US$341 millones) como el contrato más grande para un shortstop en valor total, no cuenta con una cláusula que le permite al jugador salirse de su contrato, pero sí una cláusula que le permite vetar cualquier canje.
Más temprano en la noche, Ken Rosenthal de The Athletic informó que los Mets estaban bien interesados en Correa, lo que probablemente motivó a los Gigantes a actuar rápidamente para sellar el trato. Los Mellizos también estaban entre los equipos más recientes en entablar pláticas con el campocorto boricua.
No fue sorpresa cuando Correa se salió de sus últimos dos años de un contrato de tres años y US$105.3 millones que firmó con los Mellizos antes de la temporada del 2022, porque había dejado en claro que buscaba un compromiso a largo plazo — y de una franquicia donde pudiera afianzarse y ayudar a desarrollar por el resto de su carrera.
No lo consiguió en Minnesota — pero ha encontrado un hogar en San Francisco.
En un difícil ambiente como bateador en el 2022, el boricua tuvo su mejor promedio desde el 2017 y tuvo una línea ofensiva de .291/.366/.467 con 22 jonrones y 24 dobletes, para igualar su bWAR de 5.2 que tuvo el año anterior.