Contrario a la cautela que muestra su equipo públicamente, el estelar torpedero dominicano Fernando Tatis Jr. se siente complacido con la rehabilitación de su muñeca operada y está optimista de un pronto regreso a la alineación de los San Diego Padres.
Tatis, de 23 años, fue operado para corregir una fractura en el hueso escafoides de su muñeca izquierda en marzo y comenzó la temporada en la lista de lesionados.
La próxima semana será sometido a una resonancia magnética para determinar si ya puede comenzar a hacer swing con el bate. Hasta ahora, ha sido limitado a ejercicios físicos y rutinas de fildeo.
“Estamos bien, contentos de ir progresando, de poner todo en las manos de Dios y seguir avanzando día a día”, dijo Tatis el jueves al programa dominicano “Béisbol en Acción”.
“Se me ha hecho largo el proceso, viendo a mi equipo jugar y no poder estar ayudando. Es difícil”, agregó Tatis, quien está acompañando a los Padres en la actual gira por San Luis y Milwaukee.
La temporada pasada, cuando faltó a 32 juegos debido, principalmente, a una lesión recurrente del hombro izquierdo, Tatis terminó tercero en la carrera por el premio Jugador Más Valioso de la Liga Nacional, detrás de Bryce Harper, de los Philadelphia Phillies, y de su compatriota y amigo cercano Juan Soto, de los Washington Nationals.
Tatis bateó .282 con 25 robos, 99 carreras anotadas, 97 impulsadas y lideró el circuito con 42 jonrones en la primera temporada de su contrato de $340 millones de dólares por 14 años.
Desde que el torpedero fue operado, San Diego dijo que la última semana de junio era la fecha más probable para que regresara a juego, pero que todo dependería del ritmo de recuperación de la muñeca.
“Todavía está atrasado en el nivel de progreso de la recuperación”, dijo en tono pesimista el manager Bob Melvin la semana pasada. “Ha estado haciendo ejercicios de campocorto, lanzando algunos tiros a la primera base y está haciendo mucho acondicionamiento, tratando de estar lo más activo posible”. agregó el piloto.
Tatis, sin embargo, sonó como alguien que espera la aprobación de los médicos, la próxima semana, para comenzar a batear y acelerar el regreso.
“Preparación [es lo que viene], ver pitcheos, tomar un par de turnos y después de ahí, vamos a estar aquí”, dijo. “Varios juegos simulados para entrar en ritmo. Estoy seguro que cuando entre en ritmo, estaré con el equipo”, agregó.
Sin su mejor jugador, San Diego tiene marca de 30-2, válida para ocupar el segundo lugar en la División Oeste y el primer puesto comodín para los playoffs de la Liga Nacional. Pero los Padres han perdido cuatro juegos consecutivos y siete de sus últimos 10.
“Ver los juegos desde la banca y por televisión en mi casa es algo sumamente difícil porque quisiera estar ayudando y dando el ciento por ciento en el terreno para mi equipo”, dijo Tatis.